Cómo dejar de comer en exceso: 7 formas de dejar el tenedor
#1. Respira profundamente 10 veces. Inhala y llena tu pecho de aire y exhala lenta y uniformemente. Cuando estés en público, puedes hacer esto sutilmente mientras te tomas el tiempo para detenerte y respirar. Luego vuelve a comer si quieres, pero con la conciencia de si realmente quieres más o no. Inhalar con una respiración grande y profunda y exhalar a un ritmo lento y mesurado hace que hagas una pausa por un momento para reconocer tu respiración. Esta pausa abre espacio para ser consciente de lo que estás haciendo, en lugar de ir mordiendo bocado...

Cómo dejar de comer en exceso: 7 formas de dejar el tenedor
#1. Respira profundamente 10 veces.
Inhala y llena tu pecho de aire y exhala lenta y uniformemente. Cuando estés en público, puedes hacer esto sutilmente mientras te tomas el tiempo para detenerte y respirar. Luego vuelve a comer si quieres, pero con la conciencia de si realmente quieres más o no.
Inhalar con una respiración grande y profunda y exhalar a un ritmo lento y mesurado hace que hagas una pausa por un momento para reconocer tu respiración. Esta pausa abre espacio para ser consciente de lo que estás haciendo, en lugar de comer bocado a bocado sin darte cuenta de que acabas de terminar todo el plato. Una vez que seas consciente de esto, podrás decidir si realmente quieres continuar o no y por qué.
#2. Juega contigo mismo: mastica cada bocado 20 veces.
Masticar y contar no sólo te ayuda a concentrarte en lo que estás comiendo, sino que también te ralentiza para prolongar el disfrute de la comida. ¿Por qué no prolongar el sabor el mayor tiempo posible?
#3. Beba un vaso lleno de agua entre bocados.
Esto seguramente te llenará rápidamente. Incluso si no bebes un vaso entero, el modo de piloto automático del Tenedor a la Boca se detendrá cuando dejes el tenedor para tomar algunos sorbos.
#4. Sea honesto y pregunte: "¿Qué pasa ahora si dejo de hacerlo?"
¿Te sentirías privado de placer? ¿Enojado, decepcionado? ¿O victorioso y orgulloso? Imagina el escenario y lo que harías. Luego imagina cómo te sentirías una hora más tarde si te detuvieras antes de excederte.
Simplemente hacer una pausa por un momento para pensar en el resultado puede generar el impulso para detenerse. Si bien ciertamente no es fácil dejar de comer cuando estás en medio de ello, saber que tienes la capacidad de tomar una decisión te da poder.
#5. Si estás solo, desnúdate y mira cuánto tiempo puedes comer.
La incomodidad de todo esto puede ser suficiente para hacer que tu cerebro se detenga.
#6. Mantenga una libreta cerca.
Cuando estés a punto de comer o quieras comer más, escribe una lista de al menos 20 razones por las que deberías seguir comiendo. Esto te da perspectiva y conciencia de lo que estás haciendo y cómo lo justificas.
#7. Toma tu comida y siéntate en algún lugar donde normalmente no comes.
Tal vez esté en el suelo de tu sala de estar, en una habitación de invitados, en tu jardín, etc. Cuando vas a otro lugar, tu atención permanece centrada en el presente en lugar de deslizarse hacia el patrón familiar.
Utilice estos consejos para "sacudirse" y tomar conciencia de lo que está haciendo para poder decidir si realmente desea seguir comiendo o si está listo para dejar de comer. Puedes recordar que siempre podrás volver a él más tarde. “Despertar” a lo que estás haciendo y tomar la decisión de continuar o no es lo que te pone en el poder.
Inspirado por Chelsea Lorynn O'Brien