¿Cómo puedes encontrar alegría (o al menos paz) en tiempos difíciles?
La vida tiene sus altibajos, pero ayuda a encontrar sentido y cambiar rutinas. Un paciente adulto mayor me dijo una vez: "Hay décadas buenas y décadas malas". Recuerdo el shock cuando escuché esto: el paciente se refería a su relación con su esposa. Para muchos de nosotros, 10 años parece un tiempo muy largo de lucha. ¿Cómo encontramos alegría cuando tenemos dificultades, o al menos hacemos que nuestras luchas sean soportables? La pérdida de alegría puede ser un signo de un problema de salud mental, o...

¿Cómo puedes encontrar alegría (o al menos paz) en tiempos difíciles?
La vida tiene sus altibajos, pero ayuda a encontrar sentido y cambiar rutinas.
Un paciente adulto mayor me dijo una vez: "Hay décadas buenas y décadas malas". Recuerdo el shock cuando escuché esto: el paciente se refería a su relación con su esposa. Para muchos de nosotros, 10 años parece un tiempo muy largo de lucha. ¿Cómo encontramos alegría cuando tenemos dificultades, o al menos hacemos que nuestras luchas sean soportables?
La pérdida de alegría puede ser un signo de un problema de salud mental o puede ser una reacción normal.
La vida tiene sus altibajos, pero a veces los acontecimientos desafiantes ocurren todos al mismo tiempo. Cuando nuestro mundo está patas arriba, es normal sentir falta de alegría. Problemas de salud, pérdidas, separaciones, problemas de vivienda, desastres naturales: la lista de factores estresantes y eventos traumáticos graves es larga. La mayoría de los adultos experimentarán varios traumas y pérdidas importantes a lo largo de sus vidas. La pérdida de alegría en estos contextos es una parte natural de la experiencia humana.
Sin embargo, para algunas personas, la falta de alegría persiste o surge de la nada. Esto puede ocurrir con un trastorno del estado de ánimo como la depresión. La incapacidad para sentir placer (también conocida como anhedonia) forma parte incluso de los criterios diagnósticos de depresión y es bastante común. Aproximadamente el 8% de los adultos en los Estados Unidos experimentarán depresión en un año determinado y aproximadamente el 20% experimentarán un episodio depresivo durante su vida. La pérdida de alegría también puede estar asociada con otras enfermedades mentales, incluidas las enfermedades psicóticas y la demencia. Ciertos medicamentos, incluidos (paradójicamente) los utilizados para tratar la depresión, también pueden causar entumecimiento emocional y pérdida de alegría.
¿Cuál es la diferencia entre alegría y felicidad?
A menudo se usan indistintamente alegría y felicidad. Sin embargo, técnicamente hablando, la felicidad se refiere a los sentimientos placenteros (emociones) que resultan de una situación, experiencia u objetos, mientras que la alegría es un estado mental que se puede encontrar incluso en momentos de tristeza o incertidumbre. De modo que podemos trabajar para cultivar la alegría independientemente de nuestras circunstancias. Ganar la lotería puede desencadenar felicidad (a corto plazo); Dedicar tiempo a realizar actividades significativas puede generar felicidad a largo plazo.
Neurotransmisores de alegría y bienestar
Aunque la neurobiología de la alegría es compleja, existen algunos neurotransmisores que destacan por promover sentimientos positivos: dopamina, serotonina, oxitocina y endorfinas. La buena noticia es que muchos cambios en nuestras vidas pueden aumentar estos niveles de neurotransmisores. Por ejemplo, correr puede producir una “euforia del corredor”; Pasar tiempo con un bebé libera oxitocina, la “hormona del abrazo”, que te hace sentir conectado.
Los efectos de los neurotransmisores en el cuerpo son muy variados, desde relajar los músculos hasta acelerar el ritmo cardíaco, pero pueden conducir a una última forma común de promover sentimientos positivos. Ya sea que se trate de encontrar significado o disfrutar de relaciones de apoyo, los beneficios para la mente y el cuerpo son de gran alcance.
¿Cómo se aumenta la alegría?
En tiempos difíciles, es doblemente importante cambiar tu rutina para poder experimentar alegría. A continuación se ofrecen algunas ideas, aunque puede que sea necesario realizar algunas pruebas y errores para encontrar la que funcione mejor para usted:
- Führen Sie regelmäßige aerobe körperliche Aktivität durch. Stellen Sie sich körperliche Aktivität als Freisetzung eines Schaumbads von Neurotransmittern vor – und ihre Wirkung hält noch lange an, nachdem die Übung vorbei ist.
- Widme dich anderen. Aktivitäten wie Freiwilligenarbeit bereiten mehr Freude als die Konzentration auf sich selbst.
- Verbinde dich mit deiner spirituellen Seite. Wenn wir uns mit etwas verbinden, das größer ist als wir selbst, entwickeln wir Gefühle der Dankbarkeit, des Mitgefühls und des Friedens. Meditation ist eine wirkungsvolle Methode, um Gehirnwege zu modifizieren, um die Freude zu steigern.
- Entdecken Sie etwas Neues. Als Menschen sind wir fest verdrahtet, um Freude zu empfinden, wenn wir Neues erleben. Die Entwicklung einer neuen Beschäftigung kann uns helfen, unsere Energie neu zu fokussieren.
- Erlaube dir, dir ein paar Momente des Vergnügens zu gönnen, besonders wenn du dich niedergeschlagen fühlst. Sie können den Joy Generator von NPR für einen Vorgeschmack ausprobieren.
- Achten Sie auf das Gute. Eine freudige Denkweise kann entwickelt werden, erfordert aber Übung. Die Drei-gute-Dinge-Übung hilft Ihnen, den Tag über nach den positiven Dingen Ausschau zu halten.
- Umgekehrt Negativität begrenzen. Ob es sich um geschwätzige Kollegen, eine giftige Beziehung zu einem Familienmitglied oder einen sich beschwerenden Freund handelt, es beeinflusst uns direkt, Zeit mit einer negativen Denkweise zu verbringen. Es ist in Ordnung, Grenzen zu setzen.
- Konzentrieren Sie Ihre Bemühungen auf das, was Ihrem Leben Sinn verleiht (und konzentrieren Sie sich nicht auf Geld).
- Fragen Sie Ihren Arzt, ob Ihre Medikamente Ihre Fähigkeit, Freude zu erleben, beeinträchtigen können, insbesondere wenn Sie Antidepressiva einnehmen.
Beneficios sorprendentes de la alegría
Independientemente de los cambios que realice en su forma de pensar o en su rutina diaria, aumentar su capacidad para encontrar la alegría puede brindarle beneficios duraderos para la salud. Su estado mental puede estimular su sistema inmunológico (las células inmunes incluso tienen receptores para neurotransmisores). Las intervenciones para aumentar la alegría también pueden reducir las hormonas del estrés, reducir el dolor y aliviar la depresión. Finalmente, encontrar la alegría puede ayudarte a vivir más tiempo.