Los nuevos casos de demencia están disminuyendo mientras la prevalencia sigue aumentando debido al envejecimiento de la población
Los nuevos casos de demencia en Estados Unidos disminuyeron de 2015 a 2021, pero el número de personas que viven con esta afección siguió aumentando debido al envejecimiento de la población, según The BMJ Today. Además, se observó una mayor carga de demencia en comunidades marginadas y de bajos recursos, lo que destaca la importancia de los enfoques políticos para promover una atención equitativa de la demencia, afirman los investigadores. Se estima que la demencia se duplicará para 2060 y afectará a casi 14 millones de personas en los Estados Unidos, con impactos sociales y económicos generalizados. Evidencia de alta calidad de tendencias recientes en casos nuevos...
Los nuevos casos de demencia están disminuyendo mientras la prevalencia sigue aumentando debido al envejecimiento de la población
Los nuevos casos de demencia en Estados Unidos disminuyeron de 2015 a 2021, pero el número de personas que viven con esta afección siguió aumentando debido al envejecimiento de la población.El BMJHoy.
Además, se observó una mayor carga de demencia en comunidades marginadas y de bajos recursos, lo que destaca la importancia de los enfoques políticos para promover una atención equitativa de la demencia, afirman los investigadores.
Se estima que la demencia se duplicará para 2060 y afectará a casi 14 millones de personas en los Estados Unidos, con impactos sociales y económicos generalizados. Sin embargo, es escasa la evidencia de alta calidad sobre las tendencias recientes en los casos nuevos (incidencia) y la prevalencia (casos existentes) de demencia en la práctica clínica habitual.
Para abordar esto, los investigadores utilizaron datos de reclamaciones médicas para determinar la incidencia y prevalencia de la demencia por raza, género y vecindario en más de 5 millones de reclamaciones de beneficiarios de Medicare de 66 años o más entre 2015 y 2021.
Después de tener en cuenta las diferencias de edad y género, la incidencia general de la demencia disminuyó del 3,5 % al 2,8 % entre 2015 y 2021, pero la prevalencia aumentó del 10,5 % al 11,8 % durante este tiempo.
Los beneficiarios masculinos tuvieron una incidencia mayor que las beneficiarias femeninas en 2015 (3,5% versus 3,4%), que aumentó en 2021 (2,9% versus 2,6%).
Para dar algo de contexto a estas cifras, los autores señalan que, si bien los hombres tienen una incidencia mayor que las mujeres de la misma edad, la mayoría de las personas con demencia son mujeres (60% en 2021). Por lo tanto, el impacto a nivel poblacional sobre la demencia es más prominente en las mujeres (probablemente porque más mujeres viven lo suficiente como para desarrollar demencia).
Además, la carga de la demencia se distribuyó de manera desigual, con la mayor incidencia y prevalencia de demencia entre los beneficiarios negros y que vivían en vecindarios socioeconómicamente desfavorecidos.
Por ejemplo, la incidencia fue más alta en 2015 para los beneficiarios negros (4,2%), seguidos de los beneficiarios hispanos (3,7%) y los beneficiarios blancos (3,4%), y en 2021 para los beneficiarios negros (3,1%), seguidos de los beneficiarios blancos (2,8%) y los beneficiarios hispanos (2,6%).
Las posibles razones de la menor incidencia de demencia incluyen un mejor tratamiento de los factores de riesgo cardiovascular y muertes por Covid-19 en pacientes que de otro modo habrían sido diagnosticados con demencia, mientras que el aumento de la prevalencia probablemente se deba a que más personas sobreviven el tiempo suficiente para desarrollar demencia o a más personas que viven más tiempo después de haber sido diagnosticadas con demencia, por ejemplo, los autores.
Este es un estudio observacional, por lo que no se pueden sacar conclusiones firmes sobre causa y efecto, y los autores reconocen varias limitaciones, incluido el hecho de que las reclamaciones de Medicare pueden no ser completamente precisas, estar limitadas en su clasificación de raza y etnia y pueden no aplicarse a pacientes con diferentes coberturas de seguro.
Aun así, dicen que sus hallazgos se basan en una gran muestra nacional de datos recopilados de forma rutinaria, lo que les permitió reflejar con precisión los patrones de diagnóstico observados en la práctica clínica general y llenar un vacío importante en la literatura.
Piden más estudios para examinar los mecanismos de las disparidades observadas y dicen que las disparidades en estas medidas por raza/etnia, género y estatus socioeconómico del vecindario deberían motivar acciones futuras para promover la equidad en salud.
Estos resultados son consistentes con los de otros estudios, pero el uso de datos de rutina para descubrir tendencias subyacentes plantea desafíos, afirman investigadores británicos en un editorial vinculado.
Por ejemplo, señalan que para las minorías marginadas que están subrepresentadas en los planes de pago por servicio de Medicare, las verdaderas disparidades a través del índice de deducción por área son mayores que las reportadas. Una mejor vigilancia de la salud, una mayor concienciación y un diagnóstico en una etapa más temprana también podrían aumentar las cifras de los grupos más vulnerables y enmascarar aún más las desigualdades socioeconómicas.
Por lo tanto, estos hallazgos dicen que "no sólo es necesario mejorar los servicios para las personas con demencia en comunidades donde se espera una mayor incidencia y prevalencia, sino también una necesidad de desarrollar políticas para mejorar los perfiles de los factores de riesgo en todas las poblaciones".
Fuentes:
Blas, B.,et al. (2025). Incidencia y prevalencia de la demencia entre los beneficiarios de Medicare en EE. UU., 2015-21: estudio poblacional. BMJ. doi.org/10.1136/bmj-2024-083034.