Presión arterial alta: la principal causa de la demencia: así es como se puede prevenir
El mayor factor de riesgo de demencia sigue siendo la presión arterial alta. Lea los resultados de un estudio y aprenda más sobre la prevención.

Presión arterial alta: la principal causa de la demencia: así es como se puede prevenir
Cada vez más personas en Alemania padecen demencia, una enfermedad que tiene un gran impacto en la vida tanto de los pacientes como de sus familiares. Actualmente, alrededor de 1,8 millones de ciudadanos viven con esta enfermedad nerviosa y las previsiones sugieren que esta cifra podría aumentar a 2,8 millones en 2050. Por eso, los científicos buscan constantemente formas de prevenir el brote de la enfermedad o frenar su progreso.
Un importante estudio del University College de Londres arroja ahora luz sobre los factores de riesgo asociados con la demencia. El análisis evaluó 68 años de datos, de 1947 a 2015, de 27 estudios que trataron con pacientes con demencia. Esta investigación, publicada en la prestigiosa revista The Lancet Public Health, identificó algunos factores clave que aumentan el riesgo de demencia.
Factores de riesgo para la demencia
Los investigadores encontraron que cinco factores principales pueden contribuir significativamente al desarrollo de la demencia. Estos son:
- Diabetes
- Fettleibigkeit
- Bluthochdruck
- Rauchen
- Bildungsniveau
Entre estos factores de riesgo destaca uno en particular: la presión arterial alta, también conocida como hipertensión, ha sido identificada como el mayor factor de riesgo que se ha mantenido constante a lo largo de los años. Según Naaheed Mukadam, psiquiatra y autor principal del estudio, abordar los factores de riesgo cardiovascular como la presión arterial alta es crucial para desarrollar medidas de prevención eficaces contra la demencia.
La presión arterial alta es una afección grave que no sólo afecta al sistema cardiovascular sino que también puede provocar otros problemas de salud. Cuando la presión arterial se eleva durante un largo período de tiempo, puede provocar una pérdida de células nerviosas y, en última instancia, aumentar el riesgo de demencia. Por tanto, la necesidad de controlar la presión arterial es cada vez más clara para la salud pública.
Antecedentes científicos
Los expertos recurren a las enfermedades neurodegenerativas, entre las que también se encuentra la demencia, cuando las células nerviosas y sus funciones se pierden y el cerebro ya no es capaz de compensar este daño. Además de la demencia, entre las enfermedades de este tipo más conocidas se encuentra la enfermedad de Parkinson. La complejidad de estas enfermedades hace que sea difícil investigarlas, pero aún es necesario avanzar para contrarrestar el creciente número de afectados.
En vista del espectacular aumento del número de personas que padecen demencia en Alemania, la promoción de la salud preventiva debería ser la máxima prioridad de la sociedad. La educación sobre los factores de riesgo y los estilos de vida saludables puede ayudar a reducir la incidencia de la demencia y concienciar a la población. Se ha demostrado que evitar hábitos poco saludables, como el alcohol y el cigarrillo, tiene un efecto positivo sobre la presión arterial y, en definitiva, sobre el riesgo de desarrollar demencia.
Por lo tanto, los resultados de este estudio deberían estimular el interés público y animar a todos los involucrados a promover un estilo de vida activo y aprender sobre sus propios valores de salud. Desde esta perspectiva, queda claro lo importante que es desarrollar estrategias de salud individualizadas para afrontar eficazmente el desafío de la demencia.
La presente investigación proporciona información relevante, pero no descarta que los problemas de salud individuales siempre deban discutirse con un médico o especialista. La información general sólo forma parte del panorama general de salud y no sustituye la visita al médico ni diagnósticos específicos.