Cómo la forma del cuerpo influye en el riesgo de cáncer de colon
En un estudio reciente publicado en Scientific Advances, los investigadores aclaran la conexión entre los subtipos de obesidad y el riesgo de cáncer colorrectal. Factores de riesgo del cáncer colorrectal El cáncer colorrectal es uno de los tres cánceres más comunes en todo el mundo y está asociado con la segunda tasa más alta de mortalidad relacionada con el cáncer. Estudios anteriores han demostrado que la obesidad o el sobrepeso con un índice de masa corporal (IMC) superior a 25 kg/m2 es un factor de riesgo de cáncer colorrectal. Otros marcadores antropométricos, como la relación cintura-cadera y la circunferencia de la cadera o la cintura, han mostrado asociaciones similares con el riesgo de cáncer colorrectal. Sin embargo, estos factores no proporcionan información adicional sobre la etiología o el riesgo diferencial del cáncer colorrectal. Ya sea eso…
Cómo la forma del cuerpo influye en el riesgo de cáncer de colon
En un estudio reciente publicado enAvances científicosLos investigadores están aclarando la conexión entre los subtipos de obesidad y el riesgo de cáncer de colon.
Factores de riesgo del cáncer de colon
El cáncer colorrectal es uno de los tres cánceres más comunes en todo el mundo y está asociado con la segunda tasa más alta de mortalidad relacionada con el cáncer.
Estudios anteriores han demostrado que la obesidad o el sobrepeso con un índice de masa corporal (IMC) superior a 25 kg/m2 es un factor de riesgo de cáncer colorrectal. Otros marcadores antropométricos, como la relación cintura-cadera y la circunferencia de la cadera o la cintura, han mostrado asociaciones similares con el riesgo de cáncer colorrectal.
Sin embargo, estos factores no proporcionan información adicional sobre la etiología o el riesgo diferencial del cáncer colorrectal. Aún no está claro si el riesgo de cáncer colorrectal varía según el subtipo de obesidad.
Sobre el estudio
En el presente estudio, los investigadores realizaron un análisis de componentes principales de medidas antropométricas como el IMC, el peso, la altura, la circunferencia de la cadera y la cintura y la relación cintura-cadera para definir los fenotipos de la forma del cuerpo que reflejan diferentes subtipos de obesidad.
Luego, estos fenotipos se utilizaron para evaluar el riesgo de cáncer colorrectal según el género y las subregiones como el recto, el colon y el colon proximal o distal. Los mecanismos potenciales por los cuales estos rasgos influyen en el riesgo de cáncer colorrectal también se determinaron examinando la expresión de genes asociados a rasgos específicos de tejido.
Se llevó a cabo un estudio observacional prospectivo entre participantes registrados en el Biobanco del Reino Unido, que incluyó aproximadamente 4.000 casos de cáncer colorrectal. Además, se realizó un estudio de asociación de todo el genoma (GWAS) de los participantes del Biobanco del Reino Unido y un análisis de enriquecimiento de la expresión tisular para identificar los factores que contribuyen funcionalmente a la forma del cuerpo.
También se realizó un análisis de aleatorización mendeliana en un conjunto de datos de grandes consorcios genéticos de cáncer colorrectal para proporcionar evidencia de la causalidad de la asociación entre los fenotipos de la forma del cuerpo y el riesgo de cáncer colorrectal. Los consorcios genéticos incluidos en este análisis no se superpusieron con los participantes del Biobanco del Reino Unido.
Los análisis consideraron varias variables de confusión, incluido el género, la edad, el nivel educativo, el índice de privación de Townsend, el centro de reclutamiento, el origen étnico, factores del estilo de vida como el tabaquismo, la actividad física, la adherencia a una dieta saludable, el consumo y la frecuencia del alcohol, el uso de medicamentos, incluida la terapia hormonal en mujeres, y antecedentes familiares de cáncer colorrectal. Sin embargo, los investigadores no se centraron en la diabetes tipo 2, creyendo que la presencia de esta enfermedad mediaría el subtipo de obesidad en lugar de confundirlo.
Se calcularon los índices de riesgo para cada componente principal, con modelos estratificados por género, edad y centro de reclutamiento y ajustados por varios factores de confusión. Para evitar el papel potencialmente confuso del tabaquismo, también se realizó un análisis de sensibilidad excluyendo a los fumadores actuales y anteriores.
Resultados del estudio
Se identificaron cuatro fenotipos de forma corporal que reflejan subtipos de obesidad: obesidad general, altura con relación cintura-cadera baja, altura con obesidad central y atlética. De estos subtipos, los fenotipos de obesidad general y obesidad central grande tuvieron las asociaciones más altas con el riesgo de cáncer colorrectal.
El análisis de aleatorización mendeliana confirmó las asociaciones positivas entre estos dos fenotipos y un mayor riesgo de cáncer colorrectal. Estas asociaciones también fueron consistentes en los cuatro subtipos de cáncer colorrectal examinados y tanto en hombres como en mujeres.
GWAS para la expresión de genes asociados a rasgos específicos de tejido indicó que en el fenotipo obeso general, los patrones de expresión de genes específicos de tejido se asociaron con una mayor proporción de tejido cerebral o neuronas. En el fenotipo grande con obesidad central, los patrones de expresión genética indicaron una mayor proporción de células mesenquimales. Estos resultados sugieren que las vías de señalización molecular que contribuyen al mayor riesgo de cáncer colorrectal pueden ser diferentes para los distintos subtipos de obesidad.
Conclusiones
El riesgo de cáncer de colon varía según el subtipo de obesidad. Además, los dos fenotipos asociados con el mayor riesgo de cáncer colorrectal fueron generalmente obesos y altos con fenotipos de obesidad central. Los resultados del estudio también sugieren que las vías causales que contribuyen al riesgo de cáncer colorrectal pueden diferir entre los subtipos de obesidad.
Fuentes:
- Peruchet-Noray, L., Sedlmeier, A. M., Dimou, N., et al. (2024). Tissue-specific genetic variation suggests distinct molecular pathways between body shape phenotypes and colorectal cancer. Science Advances 10(16). doi:10.1126/sciadv.adj1987